El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha es un libro excepcional; de los diálogos entre Don Quijote y Sancho se desprende una rica y excepcional filosofía de vida.
Cervantes -en el Quijote- nos enseña la importancia de tener sueños aunque parezcan imposibles o incluso que nos tachen de locos. Las reflexiones de don Quijote sobre valores, virtudes y defectos humanos [fidelidad, cortesía, honestidad, libertad, justicia, honor, solidaridad, amor...], junto a la sabiduría popular representada por Sancho Panza constituyen valiosas enseñanzas vigentes hasta nuestros días.
Primera Parte
Mario Vargas LLosa en la presentación de la obra escribió:
El fundamento de la libertad es la propiedad privada, y que el verdadero gozo sólo es completo si, al gozar, una persona no ve recortada su capacidad de iniciativa, su libertad de pensar y de actuar. (...) ¡Venturoso aquel a quien el cielo dio un pedazo de pan sin que le quede obligación de agradecerlo a otro que al mismo cielo! (...) quien es pobre y depende de la dádiva o la caridad para sobrevivir, nunca es totalmente libre. Pp. XIX
Patria, ese espacio concreto y humano, que la memoria puede abarcar, un paisaje, unas gentes, unos usos y costumbres que el hombre y la mujer conservan en sus recuerdos como un patrimonio personal y que son sus mejores credenciales. (...) todos recuerdan esas pequeñas comunidades donde han dejado amores, amigos, familias, viviendas y animales, con irreprimible nostalgia. Pp XXII
Martín de Riquer en la presentación de la obra escribió:
Procurad que, leyendo vuestra historia, el melancólico se mueva a risa, el risueño la acreciente, el simple no se enfade, el discreto se admire de la invención, el grave no la desprecie, ni el prudente no deje de alabarla. PP LXXII
Quien no ríe leyendo el Quijote es o porque no entiende la novela o porque tiene la desgracia de no poseer la facultad de reír, que es la que distingue al hombre de los animales. Pp. LXXIII
Cap.XI
¡Gran Merced! - dijo Sancho - (...) mucho mejor me sabe lo que como en mi rincón sin melindres ni respetos, aunque sea pan y cebolla, que los gallipavos de otras mesas donde me sea forzoso mascar despacio, beber poco, limpiarme a menudo, no estornudar ni toser si me viene en gana, ni hacer otras cosas que la soledad y la libertad traen consigo. Pp 96
Porque a quien se humilla, Dios le ensalza.
Dichosa edad y siglos dichosos aquellos a quien los antiguos pusieron nombre de dorados, (...) entonces los que en ella vivían ignoraban estas dos palabras de tuyo y mío. Eran en aquella santa edad todas las cosas comunes; (...) Todo era paz entonces, todo amistad, todo concordia. Pp. 97
Yo conozco, con el natural entendimiento que Dios me ha dado, que todo lo hermoso es amable; mas no alcanzo que, por razón de ser amado, esté obligado lo que es amado por hermoso a amar a quien le ama. Pp. 125
Cap XV
- Señor, yo soy hombre pacífico, manso, sosegado, y sé disimular cualquiera injuria, porque tengo mujer y hijos que mantener. Sancho Panza Pp. 133
- ...es menester mucho tiempo para venir a conocer las personas, y que no hay cosa segura en esta vida. Sancho Panza Pp. 134
- - Con todo eso, te hago saber, hermano Panza -replicó don Quijote -, que no hay memoria a quien el tiempo no acabe, ni dolor que muerte no le consuma.
(...) Más, con todo esto, sube en tu jumento, Sancho el bueno, y vente tras mí, que Dios, que es proveedor de todas las cosas, no nos ha de faltar, y más andando tan en su servicio como andamos, pues no falta a los mosquitos del aire ni a los gusanillos de la tierra ni a los renacuajos del agua, y es tan piadoso, que hace salir su sol sobre los buenos y los malos y llueve sobre los injustos y justos. Pp 164
Porque te hago saber, Sancho, que la boca sin muelas es como molino sin piedra, y en mucho más se ha de estimar un diente que un diamante. Pp 165.
De este capítulo rescató algunas frases que bien pueden ser ahora "dichos populares".
- No es bueno tentar a Dios acometiendo tan desaforada hecho, donde no se puede escapar sino por milagro. Pp 170
- La codicia rompe el saco
- Tiene el miedo muchos ojos y ve las cosas debajo de la tierra, cuanto más encima en el cielo. Pp 170
- Esa es natural condición de mujeres - dijo Don Quijote -, desdeñar a quien las quiere y amar a quien las aborrece. pP 179
- Tantas letras tiene un no como un sí (...) harta ventura tiene un delincuente que está en su lengua su vida o su muerte, y no en la de los testigos y probanzas Pp 201
bien sé que no hay hechizos en el mundo que puedan mover y forzar la voluntad, como algunos simples piensan, que es libre nuestro albedrío y no hay yerba ni encanto que le fuerce: lo que suelen hacer algunas mujercillas simples y algunos embusteros bellacos es algunas mixturas y venenos con que vuelven locos a los hombres, dando a entender que tienen fuerza para hacer querer bien, siendo, como digo, cosa imposible forzar la voluntad Pp. 203
- todo el mundo calle y viva bien y hable mejor.
- una de las partes de la prudencia es que lo que se puede hacer por bien no se haga por mal,
- Dios hay en el cielo que no se descuida de castigar al malo ni de premiar al bueno, y no es bien que los hombres honrados sean verdugos de los otros hombres, no yéndoles nada en ello. Pp 207
- El hacer bien a villanos es echar agua en la mar. Pp 211 [Cap XXIII]
- no sé nada, no soy amigo de saber vidas ajenas, que el que compra y miente, en su bolsa lo siente. [Sancho P. Pp 233 Cap. XXV]
- Porque has de saber, Sancho, si no lo sabes, que dos cosas solas incitan a amar, mas que otras, que son la mucha hermosura y la buena fama, Pp 244 Cap XXV
el casado a quien el cielo había concedido mujer hermosa tanto cuidado había de tener qué amigos llevaba a su casa como en mirar con qué amigas su mujer conversaba, porque lo que no se hace ni concierta en las plazas ni en los templos ni en las fiestas públicas ni estaciones (cosas que no todas veces las han de negar los maridos a sus mujeres), se concierta y facilita en casa de la amiga o la parienta de quien más satisfacción se tiene. Pp 329
le dijo que hacia notorio agravio a su mucha amistad en andar buscando rodeos para decirle sus más encubiertos pensamientos , pues tenía cierto que se podía prometer de él o ya consuelo para entretenellos o ya remedio para cumplillos. Pp 331
¿Qué hay que agradecer - decía él- que una mujer sea buena si nadie le dice que sea mala?
porque los buenos amigos han de probar a sus amigos y valerse de ellos , como dijo un poeta <usque ad aras> [hasta el altar], que quiso decir que no se habían de valer de su amistad en cosas que fuesen contra Dios. Pp 333
Tú me tienes por amigo y quieres quitarme la honra, cosa que es contra toda amistad; y (...) pretendes que yo te la quite a ti. Pp 338
Mira que el que busca lo imposible, es justo que lo posible se le niegue, como lo dijo mejor un poeta diciendo:
Busco en la muerte la vida,salud en la enfermedad,en la prisión libertad,en lo cerrado saliday en el traidor lealtad.Pero mi suerte, de quienjamás espero algún bien,con el cielo ha estatuídoque, pues lo imposible pido,lo posible aún no me den. Pp 345
el amor, según he oído decir, unas veces vuela y otras anda: con este corre y con aquél va despacio; a unos entibia y a otros abrasa; a unos hiere y a otros mata; en un mismo punto comienza la carrera de sus deseos y en aquel mismo punto le acaba y concluye; por la mañana suele poner el cerco a una fortaleza y a la noche la tiene rendida, porque no hay fuerza que le resista. Pp 353
el amor no tiene otro mejor ministro para ejecutar lo que desea que es la ocasion; de la ocasión se sirve en todos sus hechos, Pp 353
las cuatro eses que dicen que han de tener todos los enamorados [sabio, solo, solícito y secreto] Pp 353
creyó que Camila, de la misma manera que había sido fácil y ligera con él, lo era para otro; que estas añadiduras trae consigo la maldad de la mujer mala, que pierde el crédito de su honra con el mismo a quien se entregó rogada y persuadida, y cree que con mayor facilidad se entrega a otros y da infalible crédito a cualquiera sospecha que de esto le venga. Pp 355
naturalmente tiene la mujer ingenio presto para el bien y para el mal, más que el varón, Pp 357
- la verdadera nobleza consiste en la virtud, Pp 379
- verá el mundo que tiene contigo más fuerza la razón que el apetito. Pp 381
- es prerrogativa de la hermosura, aunque esté en sujeto humilde, como se acompañe con la honestidad, poder levantarse e igualarse a cualquiera alteza, Pp 382
En el discurso de las armas y las letras
- pero el tiempo, descubridor de todas las cosas, lo dirá cuando menos lo pensemos. Pp. 386
y es razón averiguada que aquello que más cuesta se estima y debe estimar en más.
lo que más es de admirar: que apenas uno ha caído donde no se podrá levantar, cuando otro ocupa su mismo lugar; y si éste también cae otro y otro le sucede, sin dar tiempo al tiempo de sus muertes: Pp 397
- porque ya se sabe que la hermosura de algunas mujeres tiene días y sazones y requiere accidentes para disminuirse o acrecentarse, XLI Pp 422
- más fuerza tiene el tiempo para deshacer y mudar las cosas que las humanas voluntades. XLIV Pp 463
- Aquí no hay mas que hacer sino que cada uno tome lo que es suyo, y a quien Dios se la dio, San Pedro se la bendiga. XLV Pp 468
- ¡Oh bellaco villano, malmirado, descompuesto, ignorante, infacundo, deslenguado, atrevido, murmurador y maldiciente! (...) ¡Vete de mi presencia, monstruo de naturaleza, depositario de mentiras, almario <armario> de embustes, silo de bellaquerías, inventor de maldades, publicador de sandeces, enemigo del decoro que se debe a las reales personas! ¡Vete, no parezcas delante de mí, so pena de mi ira! XLVI Pp 478
- En fin, donde reina la envidia no puede vivir la virtud, ni adonde hay escaseza la liberalidad XLVII Pp 488
- puesto que es mejor ser loado de los pocos sabios que burlado de los muchos necios, XLVIII Pp 493
- ¿...No sé qué tiene fulano, ni que come, ni bebe, ni duerme, ni responde a propósito a lo que le preguntan, que no parece sino que está encantado? De donde se viene a sacar que los que no comen, ni beben, ni duermen, ni hacen las obras naturales que yo digo, estos tales están encantados, XLIX Pp 501
- cuya lección de sus valerosos hechos puede entretener, enseñar, deleitar y admirar a los más altos ingenios que los leyeren. Ésta sí sería lectura digna del buen entendimiento de vuestra merced, señor don Quijote mío, de la cual saldrá erudito en la historia, enamorado de la virtud, enseñado en la bondad, mejorado en las costumbres, valiente sin temeridad, osado sin cobardía, y todo esto, para honra de Dios, provecho suyo y fama de la Mancha, XLIX Pp 504
- De mí sé decir que despues que soy caballero andante soy valiente, comedido, liberal, bien criado, generoso, cortés, atrevido, blando, paciente, sufridor de trabajos, de prisiones, de encantos; L Pp 510
- el agradecimiento que solo consiste en el deseo es cosa muerta, como es muerta la fe sin obras. L Pp 512
- y tan rey sería yo de mi estado como cada uno del suyo: y siéndolo, haría lo que quisiese; y haciendo lo que quisiese, haría mi gusto; y haciendo mi gusto estaría contento; y en estando uno contento, no tiene más que desear, y no teniendo más que desear, acabose, L Pp 513
- y como en los casos de amor no hay ninguno que con más facilidad se cumpla que aquel que tiene de su parte el deseo de la dama, LI Pp 518
Fin de la Primera Parte
Segunda parte
pasado por ello, que todas nuestras locuras proceden de tener los estómagos vacíos y los celebros llenos de aire. Esfuércese, esfuércese, que el descaecimiento en los infortunios apoca la salud y acarrea la muerte Pp 554
Mira Sancho - dijo don Quijote-: dondequiera que está la virtud en eminente grado, es perseguida. Pp 564
Milagros o no milagros - dijo Sancho -, cada uno mire cómo habla o escribe de las presonas, y no ponga a trochemoche lo primero que le viene al magín. Pp 571
nadie tiene para qué meterse en si truje o no truje, si gasté o no gasté:
y cada uno meta la mano en su pecho y no se ponga a juzgar lo blanco por negro y lo negro por blanco, que cada uno es como Dios le hizo, y aún peor muchas veces. Pp 576
y sé que la senda de la virtud es muy estrecha y el camino del vicio, ancho y espacioso; y sé que sus fines y paraderos son diferentes, porque el del vicio, dilatado y espacioso, acaba en muerte; y el de la virtud, angosto y trabajoso, acaba en vida, y no en vida que se acaba, sino en la que no tendrá fin; Pp 593
- Y yo digo que el consejo de la mujer es poco, y el que no le toma es loco.
- - Es el caso -dijo Sancho- que, como vuestra merced sabe, todos estamos sujetos a la muerte, y que hoy somos y mañana no, y que tan presto se va el cordero como el carnero, y que nadie puede prometerse en este mundo mas horas de vida de las que Dios quisiere darle; porque la muerte es sorda, y, cuando llega a llamar a las puertas de nuestra vida, siempre va de priesa, y no la harán detener ni ruegos, ni fuerzas, ni cetros, ni mitras,
- yo quiero saber lo que gano, poco o mucho que sea, que sobre un huevo pone la gallina, y muchos pocos hacen un mucho, y mientras se gana algo no se pierde nada.
- Sancho, amigo - respondió Don Quijote -, a las veces tan buena suele ser una gata como una rata.
- que si al palomar no le falta cebo, no le faltarán palomas. Y advertid, hijo, que vale más buena esperanza que ruin posesión, y buena queja que mala paga.
- en efecto, el hombre ha de ser hombre, y la mujer, mujer, y pues yo soy hombre dondequiera, que no lo puedo negar, también lo quiero ser en mi casa, pese a quien pesare.
- porque del tropezar o caer no se sacaba otra cosa sino el zapato roto o las costillas quebradas;
- ¡Oh envidia, raíz de infinitos males y carcoma de las virtudes! Todos los vicios, Sancho, traen un no sé qué de deleite consigo, pero el de la envidia no trae sino disgustos, rencores y rabias.
- Así, ¡Oh Sancho!, que nuestras obras no han de salir del límite que nos tiene puesto la religión cristiana que profesamos. Hemos de matar en los gigantes a la soberbia; a la envidia, en la generosidad y buen pecho; a la ira, en el reposado continente y quietud del ánimo; a la gula y al sueño, en el poco comer que comemos (...); a la lujuria y a la lascivia, en la lealtad que guardamos a las que hemos hecho señoras de nuestros pensamientos; a la pereza, con andar por todas las partes del mundo, buscando las ocasiones que nos puedan hacer y hagan, (...) cristianos, (...). Ves, aquí, Sancho, los medios por donde se alcanzan los extremos de alabanza que consigo trae la buena fama.
- y muchos son los caminos por donde lleva Dios a los suyos al cielo.
- quizá será así, aunque yo lo veré con los ojos y lo tocaré con las manos, y así lo creeré yo como creer que ahora es de día.
- - Sancho, Sancho, -respondió don Quijote-, tiempos hay de burlar y tiempos donde caen y parecen mal las burlas
- porque la verdad adelgaza y no quiebra, y siempre anda sobre la mentira, como el aceite sobre el agua.
- que has de saber, Sancho, si no lo sabes, que entre los amantes las acciones y movimientos exteriores que muestran cuando de sus amores se trata son certísimos correos que traen las nuevas de lo que allá en lo interior del alma pasa. Ve, amigo, y guíete otra mejor ventura que la mía
- se suele decir que buen corazón quebranta mala ventura,
- todas las cosas tienen remedio, si no es la muerte, debajo de cuyo yugo hemos de pasar todos, mal que nos pese, al acabar la vida.
- ni quieras con falsas alegrías alegrar mis verdaderas tristezas.
- yo nací para ejemplo de desdichados y para ser blanco y terrero donde tomen la mira y asiesten las flechas de la mala fortuna.
- De su embelesamiento le volvió Sancho Panza, diciéndole: - Señor -, las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombre, pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias;
- Pero encoméndemoslo todo a Dios, que Él es el sabidor de las cosas que han de suceder en este valle de lágrimas, en este mal mundo que tenemos, donde apenas se halla cosa que esté sin mezcla de maldad, embuste y bellaquería.
- y dejando al tiempo que haga de las suyas, que él es el mejor médico de estas y otras enfermedades.
- es menester tocar las apariencias con la mano para dar lugar al desengaño.
- - No hay para que, señor, -respondió Sancho- tomar venganza de nadie, pues no es de buenos cristianos tomarla de los agravios;
- porque la valentía que se entra en la jurisdicción de la temeridad, más tiene de locura que de fortaleza.
Es una ciencia - replicó don Quijote - que encierra en sí todas o las más ciencias del mundo, a causa que el que la profesa ha de ser jurisperito y saber las leyes de la justicia distributiva y conmutativa, para dar a cada uno lo que es suyo y lo que le conviene; ha de ser teologo, para saber dar una razón de la cristiana ley que profesa, clara y distintamente, a dondequiera que le fuere pedido; ha de ser médico, y principalmente herbolario, (...) ha de ser astrólogo, (...) saber las matemáticas, (...) y ha de estar adornado de todas las virtudes teologales y cardinales, (...) ha de saber nadar, (...) ha de guardar la fe a Dios y a su dama; ha de ser casto en los pensamientos, honesto en las palabras, liberal en las obras, valiente en los hechos, sufrido en los trabajos, caritativo con los menesterosos y, finalmente, mantenedor de la verdad, Pp 683
En el CAP XIX, de la aventura narrada por el pastor enamorado, el siguiente extracto:
Si todos los que bien se quieren se hubiesen de casar - dijo don Quijote -, quitaríase la elección y jurisdicción a los padres de casar a sus hijos con quien y cuando deben,
que el amor, según yo he oído decir, mira con unos antojos [anteojos] que hacen parecer oro al cobre, a la pobreza, riqueza, y a las lagañas, perlas.
Ahora digo - dijo a esta sazón don Quijote - que el que lee mucho y anda mucho ve mucho y sabe mucho. Pp 747
- Para sacar una verdad en limpio menester son muchas pruebas y repruebas.
- Los varones prudentes, (...), por cuatro cosas han de tomar las armas y desenvainar las espadas y poner a prueba y poner a riesgo sus personas, vidas y haciendas: la primera, por defender la fe católica; la segunda, por defender su vidas, que es de ley natural y divina; la tercera, en defensa de su honra, de su familia y hacienda; la cuarta, en servicio de su rey en la guerra justa; y si le quisiéramos agregar la quinta, que se puede contar por segunda, es en defensa de su patria.
- Cuando el valiente huye, la superchería está descubierta, y es de varones prudentes guardarse para mejor ocasión.
- No huye el que se retira - respondió don Quijote - porque has de saber, Sancho, que la valentía que no se funda sobre la base de la prudencia se llama temeridad, y las hazañas del temerario más se atribuyen a la buena fortuna que a su ánimo. Y, así, yo confieso que me he retirado pero no huido, y en esto he imitado a muchos valientes que se han guardado para tiempos mejores... Pp 767 Cap XXVIII
- Asno eres, y asno has de ser, y en asno has de parar cuando se te acabe el curso de la vida, (...) yo confieso que para ser del todo asno no me falta más que la cola, si vuestra merced quiere ponérmela, yo la daré por bien puesta, y le serviré como jumento todos los días que me quedan de mi vida.
- ¿De que temes, cobarde criatura?, ¿De qué lloras, corazón de mantequillas?, ¿Quién te persigue, o quien te acosa, ánimo de ratón casero, o qué te falta, menesteroso en la mitad, de las entrañas de la abundancia?
