viernes, 8 de diciembre de 2017

¿DE QUE LA GIRAS EN TU EQUIPO?

¿DE QUÉ LA GIRAS EN TU EQUIPO?



Cada equipo tiene su propia dinámica y forma de operar, pero es bastante común que los integrantes se desenvuelvan de maneras muy particulares. Si tuvieras que encontrarte en esta descripción, ¿dónde te ubicarías?

Los que viajan de caballito.

Compañeros o compañeras que evitan ser el que cargue con la responsabilidad, son como los zopilotes que planean, planean y planean pero nunca aterrizan. Se dice que se hacen caballito porque están dispuestos a dejarse cargar por los demás.

El führer o la generala (según el género).

Son aquellos que a la menor provocación se sienten dueños del balón, los que creen que solo sus chicharrones truenan, los que quieren decidir qué, cómo y quien va a hacer las cosas. Si trabajando son una pesadilla, imagínate como serán cuando nadamás quieren dirigir. 


Las aguerridas y aguerridos.

Flor y espejo de la andante caballería del trabajo en equipo. Puede ser que doblen pero rajarse... ¡nunca! Si hay que investigar... investigan, si hay que escribir... pues escriben, dibujan, rotulan, recortan, buscan, copian, inventan, consiguen y más. No hay un equipo que fracase con una pareja de estos heroicos compañeros.

Yo sí, pero díganme en qué.

Trabajan bien pero podrían aportar muchas más ideas, sugerencias y puntos de vista. Con un poco más de iniciativa fácilmente pasarán a la categoría anterior, aunque con menos ganas podrían pasar a la primera.

Me vale. 

La pesadilla de cualquier grupo, les da lo mismo si los invitan o no, si los incluyen en el reporte o los expulsan por comodines, si los dan de baja en el equipo o se enojan con ellos. Dos de estos hacen fracasar a los más pintados.

Vividor o vividora (según el caso).

No importa cuanto hayan participado ni como colaboraron, si el trabajo es malo no es por culpa suya porque no hicieron caso a sus sugerencias; pero si el trabajo es bueno y gusta, entonces todo es gracias a su dedicación; o bien, todo lo hicieron ellos y del equipo únicamente recibieron un poco (casi nada) de ayuda.

Fusil o salteador de caminos. 

Son aquellos que no se toman la molestia más que de copiar o transcribir lo que otro hizo, pero poniéndole su nombre. 

Fin de la publicación.

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